A Tota y Elena canto
con emoción contenida,
con la tiza y el cuaderno
soñaban cambiar la vida.
Maestras de vocación
en diferentes estambres,
sopa de letras sembraron
en las infancias con hambre.
Elena tuvo en el vientre
a su madre sin saberlo,
utópico el embarazo
hay que creer para verlo.
Conciencia dio con su ejemplo
de maestra y militante,
si no es verdad lo que digo
que venga otro y que lo cante.
Tiz tiz, canta la tiza
de la señorita Elena,
los niños alzan la mano
y alejan todas las penas.
Toc, toc, dice el bastón,
y es la Tota que camina,
alerta con estas madres,
son de América Latina.
A Elena se la llevaron
los buitres entre las garras,
la Tota empezó a buscarla,
a morir sin encontrarla.
En el arte de la fuga
Elena arriesgó sus pasos,
asilo venezolano,
Bolívar le abrió los brazos.
Los verdugos invadieron
espacio de un pueblo hermano,
de nuevo la secuestraron,
callando murió en sus manos.
Tiz tiz, canta la tiza
de la señorita Elena,
los niños alzan la mano
y alejan todas las penas.
Toc toc, dice el bastón,
y es la Tota que camina,
alerta con estas madres,
son de América Latina.
Se sabe que nada dijo
en medio de los martirios,
soñaba cambiar la vida
empezando por los niños.
Hoy nace una escuela nueva,
los niños le dan su nombre
y la recuerdan felices,
que nadie de esto se asombre.
Porque las Quinteros fueron
luminosas en su historia,
compañeras entrañables,
fundadoras de memoria.
Tiz tiz, canta la tiza
de la señorita Elena,
los niños alzan la mano
y alejan todas las penas.
Toc toc, dice el bastón
y es la Tota que camina,
alerta con estas madres,
son de América Latina.
A Tota y Elena canto
con emoción contenida,
con tiza y bastón gritando:
No hay comentarios:
Publicar un comentario